Cantor
nacido en el barrio de Caballito de la ciudad de Buenos Aires el 19 de julio de
1941, pese a que habitualmente se menciona que su lugar de nacimiento fue la ciudad
de San Francisco, en la provincia de Córdoba, a la que en realidad su familia
se trasladó cuando el futuro cantor apenas contaba con pocos días de vida.
Comenzó
estudios de técnica vocal en la ciudad de Córdoba con el profesor Piedrabuena,
un excelente barítono que había integrado los elencos del Teatro Colón.
Una
actuación en San Francisco de la orquesta de Alfredo De Ángelis en el año 1957
permitió al joven vocalista ser apreciado por Oscar Larroca, cantor de la
mencionada agrupación, quien lo vinculó a la Orquesta Juventud Triunfadora de
Córdoba, donde comenzó profesionalmente. Luego actuó con la orquesta típica
Renacimiento de San Francisco, hasta que formó su propia agrupación dirigida
por el bandoneonista Norberto Pivatto.
A comienzos
de los años sesenta emprendió su primera incursión por Buenos Aires y, aunque
tuvo la oportunidad de presentarse en varios locales, no tuvo aún la
oportunidad de incorporarse a alguna agrupación de renombre, por lo que decidió
retornar a San Francisco, considerando que todavía no había llegado su hora de
actuar en la Capital Federal.
La ocasión
sobrevino en 1964, cuando el Negro Mela, presentador de la orquesta de Pugliese
y apoderado del maestro, lo escuchó cantar durante una actuación en San
Francisco, citándolo entonces para que se presente a rendir una prueba en
Buenos Aires, dado que Pugliese se encontraba abocado a la búsqueda de una voz
joven que complementara a las de Jorge Maciel y Alfredo Belusi, quien por otra
parte estaba próximo a retirarse de la agrupación.
En esa
prueba compitió con una gran cantidad de postulantes, de los que en una primera
selección quedaron sólo cuatro, de los que él resultó el elegido por los mismos
músicos de la orquesta.
Su debut en
ésta se produjo el 10 de octubre de 1964, estrenando también el nombre
artístico que lo acompañaría de ahí en más, sugerido por el autor y difusor de
tangos Julio Jorge Nelson, quien se basó en el apócope del nombre real del
cantor, adoptando como apellido la denominación de la provincia en la que habían
transcurrido los primeros años de su vida.
Integraban
por entonces la orquesta de Pugliese, junto con éste en la dirección y piano,
Osvaldo “El Yana” Ruggiero, Julián Plaza, Emilio Balcarce, Arturo Penón en
bandoneones, Víctor Lavallén, Oscar Luis “Cacho” Herrero y Julio Carrasco en
violines, Enrique Lanoo en viola y Alcides Rossi en contrabajo.
A poco de su
incorporación, la orquesta partió hacia Japón con la finalidad de realizar una
gira pactada inicialmente por tres meses, la que sin embargo se prolongó a
seis, presentándose exitosamente durante ella en más de noventa conciertos.
Luego del
conocido episodio acontecido en 1968, cuando seis de los músicos de la orquesta
y el cantor Jorge Maciel se alejaron de ella para fundar el Sexteto Tango, la
orquesta de Pugliese, recompuesta con nuevos intérpretes y manteniendo a
Córdoba como único cantor hasta la incorporación de Adrián Guida en 1981,
siguió en plena actividad, retornando al sello Odeon para sus grabaciones, y
realizando numerosas presentaciones en el país y en el exterior.
La
permanencia de Abel en la orquesta de Osvaldo Pugliese se prolongó hasta la
disolución de la misma como consecuencia del fallecimiento del director,
ocurrido el 25 de julio de 1995, completando así treinta y un años de actuación
en esta famosa agrupación, siendo en consecuencia la suya la trayectoria más
extensa de un vocalista en la recordada formación.
Durante ella
participó en un total de cincuenta y cinco grabaciones, incluyendo en esa cifra
tres temas grabados con Jorge Maciel y dos a dúo con Adrián Guida.
La primera
de ellas fue el tango de Javier Mazzea y Carlos Lucero Cómo aprender a
quererte, llevado al disco en los estudios del sello Phillips en el mes de
enero de 1965, mientras que las últimas fueron las de las cuatro interpretaciones
realizadas en vivo en las que Abel participó en ocasión de la recordada
actuación de la orquesta en el Teatro Colón el 26 de noviembre de 1986, las que
junto con otras diecisiete registradas en esa oportunidad, fueron los últimos
registros de esta célebre orquesta.
Se recuerdan
muy especialmente entre esas grabaciones las de Enamorado estoy de Oscar
Zito y letra de José Márquez, Canción de rango de Raúl Kaplún y José
María Sune, Manón, un viejo tema de Arturo De Bassi y Antonio Podestá
que había sido grabado en el año 1942 por la orquesta de Osvaldo Fresedo con la
voz de Oscar Serpa, Por unos ojos negros de José Dames y Horacio
Sanguinetti, y Milonga para Gardel perteneciente a Carlos Viván y
Horacio Sanguinetti, grabada a dúo con Adrián Guida.
Además, la
orquesta de Pugliese realizó en su último cuarto de siglo de actuación una gran
cantidad de giras, las que con la presentación de su cantor llevaron al
conjunto nuevamente a Japón, además de dos viajes a Francia, seis a Holanda,
Bélgica, Finlandia, España y Portugal, tres a Estados Unidos, país en el que se
presentaron en las ciudades de Nueva York, Los Ángeles, Chicago, Detroit y San
Francisco, y a casi todos los países de Latinoamérica, incluyendo exitosas
presentaciones en Cuba y Ecuador. Las últimas presentaciones de la orquesta en
el exterior fueron en Japón y China.
También en
ese lapso, orquesta y cantor concretaron dos recordadas presentaciones en el
Teatro Colón, una en 1972 y otra en 1986. Al producirse el deceso del maestro,
encaró la carrera de solista y, en tal carácter, se presentó en Holanda,
Bélgica, Estados Unidos, Perú y Ecuador.
Además, como
cantor de la Orquesta Color Tango, dirigida por Roberto Álvarez, ex compañero
de Córdoba en la orquesta de Pugliese de la que fuera destacado bandoneonista,
hizo otra gira por Europa, presentándose en las ciudades italianas de Venecia,
Trieste, Roma y Lecce.
Además, con
esta formación en agosto de 1999 realizó dos grabaciones: Sueño querido,
perteneciente a Ángel Maffia y Mario Battistella, y Noches de luna, de
Daniel Álvarez y Rafael Buono.
Posteriormente
llevó al disco cuatro temas más (Los mareados, Uno, Buenos
Aires y Nostalgias) contando en esa ocasión con el marco musical
dirigido por Fernando Romano.
En la
actualidad continúa presentándose asiduamente como cantor invitado de diversas
orquestas, haciendo sus presentaciones en teatros y locales de Buenos Aires y
del interior del país.
Fuente: Torres, Carlos Federico. Gente de
tango; Tomo I
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