Bandoneonista, violinista, contrabajista y compositor, nacido en Buenos Aires el 11 de marzo de 1903. En sus comienzos violinista de diversos conjuntos, dedicó luego su labor profesional a la ejecución del contrabajo, instrumento con el que formó parte de las orquestas de Roberto Zerrillo, Vaccaro-Malerba, Francisco Lomuto y Pedro Laurenz, con quien participó en las grabaciones que esta orquesta realizó para el sello RCA Víctor desde 1937 a 1943, es decir, en la primera etapa de los registros discográficos de esta inolvidable formación.
En 1947 formó parte del acompañamiento de Francisco Fiorentino dirigido por Ismael Spitalnik, quien además ejecutaba el bandoneón. Se trataba de un cuarteto en el que Celenza interpretaba el contrabajo junto a Oscar Grimaldi en piano y a Tito Besprovan en violín. Fiorentino y con este acompañamiento se presentó en distintos cafés de Buenos Aires durante varios meses de ese año.
Luego integró la orquesta que bajo la dirección de Hugo Baralis daba el marco orquestal a Alberto Marino y en los años 1958 y 1959 formó parte del acompañamiento de Ángel Vargas, cuando la dirección del mismo estaba a cargo de Luis Stazo.
Ya a comienzos de la década del sesenta, Celenza fue contrabajista de la formación de Fulvio Salamanca, integrando además con éste y el bandoneonista Julio Esbres un trío con el que realizaron grabaciones durante los años 1969 y 1970.
Integrando el acompañamiento de Siro San Román viajó a la Unión Soviética, actuando también en Colombia con la orquesta del pianista Armando Lacava y en Francia en una de las tantas formaciones dirigidas por Manuel Pizarro en ese país.
Como compositor, si bien su producción no es muy extensa, incluye temas de muy buena calidad. Una de sus primeras producciones fue el tango Populacha, un instrumental cuyo título no tiene ninguna relación con la fina melodía que escribió en colaboración con el bandoneonista Antonio Romano, integrante de varias de las formaciones de Julio De Caro. Precisamente éste, al frente de su sexteto, lo llevó al disco en los estudios de la RCA Víctor el 20 de mayo de 1926.
Surgieron posteriormente de la inspiración de Celenza No me extraña, tango que cuenta con letra de Carlos Bahr, grabado por Pedro Laurenz con su orquesta y la voz de Juan Carlos Casas el 25 de enero de 1940; Los dos la queremos, en este caso con versos de Reinaldo Yiso, llevado al disco por Fulvio Salamanca y su cantor Luis Correa en el mes de julio de 1961; la milonga instrumental titulada Milongueracha, escrita en colaboración con el mencionado Salamanca, quien también la grabó para el sello Music Hall en el año 1964; y el muy hermoso Esta soledad, con versos de Pedro Blanco, grabado por Ángel Vargas con el acompañamiento de la orquesta dirigida por Luis Stazo en el año 1958.
Salvo en el caso de Populacha, en los restantes registros discográficos, Celenza, quien falleció el 13 de septiembre de 1981 a los 77 años de edad, participó como contrabajista.
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