Cantor,
autor y compositor nacido en Punta Alta, pocos kilómetros de la ciudad de Bahía
Blanca, el 5 de junio de 1928. Su nombre real era Lorenzo Joaquín Pires.
Era un niño
cuando sus padres se trasladaron a La Plata. Estudió en el Colegio Industrial
de esta ciudad, egresando como técnico, mientras que paralelamente estudiaba
guitarra y canto en un conservatorio platense.
En el año
1945, cuando tenía diecisiete años de edad, debutó profesionalmente en su
ciudad de residencia como cantor del cuarteto Luciani. Actuó luego en la
orquesta del pianista Ernesto Darío Saborido, incorporándose después a la
formación que codirigían el pianista Alberto Forti y el violinista Jorge
Parodi, compartiendo el rubro de cantores con Jorge Miranda, más tarde conocido
como Jorge Sobral. Para aquel entonces, Lorenzo había adoptado el nombre
artístico de Alberto Ortiz.
A comienzos
del año 1953, Osvaldo Pugliese resolvió incorporar a otro cantor a su orquesta,
dado que desde la desvinculación de Jorge Vidal en 1951, contaba únicamente con
Alberto Morán como vocalista. Lorenzo se presentó entonces a la prueba selectiva
a la que se convocó con tal motivo, resultando finalmente el elegido.
Su
incorporación se produjo en el mes de marzo de ese año, estrenando al mismo
tiempo el nombre artístico de Juan Carlos Cobos, con el que se lo conocería a
partir de ese momento.
El nuevo
cantor se adaptó rápidamente al estilo de la orquesta, aportando a esta su
excelente registro de barítono y expresivo y particular fraseo.
En sus
presentaciones, tanto en la radio como en los típicos bailes de clubes de la
época, obtuvo un importante reconocimiento del público adicto a Pugliese. Es
muy ilustrativo al respecto el relato que realizó el escribano Natalio Pedro
Etchegaray en la edición que en homenaje al maestro publicó el periódico La
Maga en el mes de julio de 1996 con motivo de cumplirse el primer
aniversario de su fallecimiento. Recordaba allí Etchegaray, oriundo de Tandil y
gran amigo de Pugliese, quien le dedicó su tango Protocoleando, una
presentación de la orquesta en el club Santamarina de esa ciudad en el verano
de 1954, con sus cantores Morán y Cobos.
En la
ocasión ambos vocalistas recibieron un apoteótico reconocimiento del público
luego de su actuación, siendo notable el beneplácito de la gente hacia ambos
sin ninguna distinción, más allá de que Morán era ya una figura consagrada y
Cobos, en cambio, realizaba por entonces sus primeras presentaciones con una
formación de tamaña popularidad como la de Pugliese.
Sus
grabaciones con la agrupación del "Troesma" alcanzaron a siete temas
registrados para el sello Odeon, uno de ellos, la canción de Gardel y Le Pera Caminito
soleado, a dúo con Morán.
Su primera
intervención en el disco fue concretada el 17 de julio de 1953, día en el que
orquesta y cantor grabaron Milonguera, el tango del guitarrista José
María Aguilar, con letra de Celedonio Flores. Su labor discográfica con esta
orquesta finalizó el 17 de marzo de 1954, oportunidad en la que dejó
registrados los tangos No es más que yo, de Luis Mandarino, y Te
aconsejo que me olvides, de Pedro Maffia y Jorge Curi.
Los tangos Es
preciso que te vayas, de Juan Carlos Cobián y Celedonio Flores; Picaneo,
de Héctor Baldi y Enrique Cadícamo; y Olvidao, perteneciente a Guillermo
Barbieri y al mismo Cadícamo, completan la lista de grabaciones de Cobos con el
maestro Pugliese, de quien se desvinculó en el mes de noviembre de 1954.
Luego estuvo
por un lapso que no superó los tres meses en la orquesta de Miguel Caló, con
quien no llegó a grabar, para viajar en mayo de 1955 al exterior con la compañía
de Jorge Lanza y Celia Queiró. Su estadía en el extranjero se prolongó hasta el
mes de octubre de 1967, recorriendo un total de 35 países.
En todo ese
tiempo estuvo radicado primeramente en España, dado que, a raíz del éxito
obtenido por el elenco del que formaba parte, Cobos decidió quedarse en ese
país para allí formar su propia compañía, integrada por bailarines y músicos.
Fijó su domicilio en Madrid y desde esta ciudad proyectó sus giras por
distintos países de Europa y África. Presentó exitosamente su espectáculo en
Francia, Italia, Bulgaria, Portugal, la entonces Yugoslavia (donde actuó ante
el Mariscal Tito, vitalicio presidente de ese país hasta su muerte) y en varios
de los países escandinavos, en los que permaneció durante dos años.
Se presentó
también en países con idiomas e idiosincrasias muy distintas a las nuestras,
como Escocia, Turquía, adonde se radicó durante cuatro años y medio; Grecia,
Líbano, Irak, Libia, Egipto, India y Senegal.
Durante su
estadía en España y en Francia, realizó grabaciones acompañado por un conjunto
musical de características muy especiales, dado que estaba integrado por
acordeón, órgano, violines, piano y bajo.
Radicado
nuevamente en la Argentina desde el mes de octubre de 1967, inició su actividad
como cantor solista, actuando en ese carácter en Buenos Aires en los locales
tangueros Caño 14 y Michelángelo, como asimismo en los programas
televisivos Grandes valores del tango y El Tango del millón,
entre otros.
En 1978,
grabó un disco de larga duración para el sello Magenta y en 1987 realizó
grabaciones acompañado por una agrupación dirigida por el pianista Ricardo
Martínez, con la que participó en la edición de un total de tres cassettes, los
que se completaron con temas cantados por él y por sus colegas Osvaldo Ribó,
Oscar Ferrari y Carlos Aguirre.
Escribió una
docena de tangos, entre ellos la letra de Me vi sin fe (En el remate),
cuya música es obra del también cantor Carlos Olmedo.
Falleció en
La Plata, ciudad en la que nuevamente estaba radicado desde su regreso al país,
el 10 de noviembre de 1999 a los 71 años de edad.
Fuente: Torres, Carlos Federico. Gente de
tango; Tomo I
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